El diseño de una tienda online debe ser intuitivo y centrado en el usuario. Esto significa crear una experiencia de usuario (UX) fluida y agradable que guíe a los visitantes desde la página de inicio hasta la finalización de la compra con la menor fricción posible. Elementos como una navegación clara, imágenes de productos de alta calidad, descripciones detalladas y un proceso de pago simplificado son fundamentales.
La estética visual (UI) también juega un papel crucial en la percepción de la marca y la confianza del consumidor. Un diseño limpio, moderno y coherente con la identidad de la marca puede influir significativamente en la decisión de compra de los usuarios.
Detrás de cada tienda online exitosa hay un código robusto y eficiente. La elección de la plataforma de eCommerce adecuada (como Prestashop, WooCommerce, entre otras) depende de las necesidades específicas del negocio, la escalabilidad deseada y las capacidades de personalización.